EL IDEAL DEL YO. Alicia HARTMANN.


Facultad de Psicología - UBA
Psicoanálisis: Freud - Cátedra II
Titular: Dr. Juan Carlos Cosentino

5. EL IDEAL DEL YO Alicia HARTMANN

La importancia que cobra el Ideal del yo en la concepcion que Lacan tiene de él pareciera no ser la misma que tiene para Freud. El problema del Ideal del yo está planteado de entrada en el primer Seminario mientras que para Freud resulta trabajoso sostenerlo como instancia y eso se define decididamente en relación a la segunda tópica. El texto bisagra donde el Ideal del yo se acerca y se confunde con el superyó es “El Yo Y El Ello”. Un capitulo de “Psicología de las Masas” que parece importante, para nuestra lectura, es “Un grado en el interior del Yo”. Alli Freud resume todo el problema donde considera al Ideal como “ese grado dentro del interior del yo”, como una gradación. En relacion a esta cuestion de la gradación, se desprende la pregunta si de alli fue que Lacan gesta el esquema optico. En la relacion entre Ideal del yo y del yo ideal, lo que Freud destaca es la cuestión de la distancia. Es decir que se define una distancia, algo medible, un espacio, que para Lacan se plasma efectivamente en la constitución de este esquema, partiendo del Ideal como constitutivo del sujeto y del objeto. Lacan parte de alli. Esto que Freud va definiendo con dificultad, para Lacan es el punto prínceps desde donde inicia su seminario. Y arranca en dos sentidos: lo aborda desde el punto de vista de la constitución del sujeto y desde el problema del objeto; y por otro lado desde cómo el Ideal entra en el dispositivo. Es decir que allí inaugura otra vertiente en su articulación con el amor de transferencia que es donde centra toda su cuestión de crítica a la IPA.

Es sabido que en la obra de Lacan este concepto va sufriendo modificaciones importantes. Desde el esquema óptico, para luego pertenecer a la estructura del Otro; es uno de los significantes de la bateria del Otro en relación a lo que se espera de un sujeto antes de su nacimiento; luego lo va depurando como rasgo unario. Este punto es importante porque se va a articular con todo el problema de la identificación como rasgo unario en su doble perspectiva. Lo que Lacan señala es que puede operar del lado del deseo del Otro y por otro lado del lado específicamente del Ideal.

También define una teoría de fin de análisis. Este es un punto fundamental. Por lo menos el Seminario 11, sabemos muy bien que es un hito, en relación a las teorías de fin de análisis y Lacan nos advierte de esta cuestión “de poner a distancia el Ideal” (la cuestión de la distancia es lo que Freud ha enfatizado), al punto de articularla en el Seminario 11 y en la “Observación sobre el informe”, en relación a si el sujeto quiere lo que desea. El Ideal como operacion de un significante es “singular en su impronta, y sería para discutir en otro contexto, que se considera con ir más allá de los ideales de la persona”.

Sobre esta operacion, cabe una interrogación sobre el deseo en relación a la constitución del sujeto en el sentido de cómo fue deseado en relación a la estructura. Este es el punto que podemos articular con “Introducción Del Narcisismo”.

Avanzando sobre el problema, lo va articulando cada vez más al goce hasta llegar a plantear en el Seminario 16 el Ideal vinculado al “cuerpo que obedece”. Lo precisa allí. Previamente lo ha hecho participar del fantasma; pensando en la tensión sexual en relación al Ideal de goce del Otro tomando la línea freudiana en relación al ideal sexual.

Es asi que nos parece que se marcan dos ejes en el estudio del Ideal que no están fuera del planteo freudiano.

El primero permite sostener una línea del Ideal vinculado al amor. Lo que constituye esta marca primera, la constitución del sujeto, la constitución del Yo ideal, la identificación en su aspecto más directo.
La otra línea, es este pasaje que se hace de “Introducción Del Narcisismo” hasta “El Yo y el Ello” que define el Ideal en relacion al deber ser, agenciado por las voces, y cobra este aspecto gozoso que se entronca con el sentimiento de culpa y que tiene que ver con esto, en el Seminario 16 y que Lacan toma fuertemente como “el cuerpo que obedece”. Nos preguntamos entonces qué lleva a Freud y a Lacan a que el Ideal vaya transformándose o acercándose cada vez más al Superyó, que tome esa forma de la conciencia moral, que definidamente después ocupe casi el lugar del Superyó. Hay párrafos en donde Freud dice Ideal del yo o superyó, directamente, ligados casi al deber ser, al imperativo. Pareciara que la clínica misma y sus obstaculos llevan a esta conclusion. Al punto que puede pensarse que la teoría de los goces de Lacan es sustentada pos este andamiaje.

Lacan centra el desarrollo del Superyó a nivel de la voz. La cuestión es cómo se introduce toda la teoría de los goces que va dándole al amor, inclusive al amor parental un sesgo diferente y que se entronca con el obscuro poder del destino parental o sea con este destino trágico que habla de este más allá en el “Problema economico del masoquismo”; que exclusivamente en Freud, se resume en esa cita al pie del “El Yo Y El Ello” donde dice que cuando trabaja la cuestión del sentimiento de culpa, se vuelve posible abordarlo cuando es prestado pero el problema surge cuando no lo es.

Freud se refiere a veces a los ideales y a veces al ideal; lo mismo hace Lacan. Cuando Freud habla de ideales, linda con una cierta teoría de los valores, en cambio la cuestión del Ideal tiene un peso diferente.
Buscando en la filosofía a la que Freud pudo tener acceso, por ejemplo una cita de la “Crítica A La Razón Pura” donde Kant define la cuestión del Ideal, “para el estoico es un ideal, un hombre que existe solo en el pensamiento pero que concuerda con la idea de sabiduría. El Ideal es así como dar la regla, sirve de prototipo para determinación compleja de la copia, para juzgar nuestros actos no tenemos otro criterio que la conducta de ese hombre divino que hay en nosotros y con el cual podemos compararnos, juzgarnos, y en consecuencia mejorarnos, aunque sin llegar jamas a su perfección. El Ideal no es una quimera es un criterio indispensable a la persona. Pretender realizarlo es impracticable y por añadidura encierra algo absurdo y poco edificante puesto que los límites naturales atentan contra la perfección de la idea”. Sabía algo de la castración. “Es importante desprender esta idea de la moralidad que atacaria al sujeto en términos de placer o de dolor”.

Nos preguntamos si Kant abre el camino a esta separación entre Ideal y moralidad necesario al fin de análisis en el intento de poner lo más posible a distancia el goce del Ideal. Este es el punto que suscita esta pregunta. Dice “muy distinto - nos agrega - es aquello que es creación de la imaginación que opera en forma de monograma, que son solamente rasgos aislados, que aunque sin determinar con una supuesta regla, constituyen una especie de dibujo, en medio de distintas experiencias, de una imagen determinada que los pintores y fisonomistas pretenden tener en la mente y que según ellos es una visión horrorosa de sus productos o aun psicosis que no puede comunicarse”. Esto es Kant. No seria extraño que Freud haya transitado por estas lecturas, lo sabemos por otros textos, y parece que aquí está en ciernes todas las diferencias que se despliegan en el psicoanálisis.

Vayamos a “Introducción del Narcisismo”, a la cuestión del narcisismo primario. Cuando Freud habla de narcisismo primario habla siempre de suposición, o quiere decir que es una suposición. Su posición, que implica un supuesto del cual partimos; que suponemos en el niño. Dice “es una de las premisas de la cual partimos”. Una premisa también es una suposición, es como algo de lo que uno parte para una investigación, que no está sujeto a comprobación. Podria ser un postulado, o un tal vez un axioma.

Una necesidad metodológica que hace que Freud diga - en el capitulo dos - que “el narcisismo primario es más fácil de asir, de comprobar mediante una inferencia retrospectiva de otro punto”. Es decir aquí está marcando, vuelvo a este tema de la distancia, el tema “del otro punto”; es decir estamos hablando de punto, de distancia. Evidentemente esto podría dar un pie para, digamos que Lacan empieza a pensar en la posibilidad del esquema óptico. Y al final dice “si consideramos la actitud de los padres que sostienen - o sea son ellos los que sostienen este ideal, estos padres con actitud tierna, con amor - nacimiento de un narcisismo propio ha mucho abandonado”. Luego Freud dice que de esta sobrestimación en relación al niño se realiza, queda una marca inequívoca, es decir ahí enfatiza el lugar de la marca, lo que vamos a trabajar del lado del rasgo, que va a gobernar este vinculo afectivo. 

Y diríamos no hay duda de que Freud está aludiendo a lo que luego podemos articular con cualquiera de los trabajos sobre organización infantil a la falicización del cuerpo del niño. Porque Freud utiliza algo que es importante, la palabra “compulsión a atribuir al niño todas las perfecciones”. Parece fundamental. Dentro de lo que se podría decir la catexia amorosa, aparece la palabra compulsión. Podemos pensar que esta cuestión que Freud está marcando, de atribuirle al niño todas las perfecciones, sostendra que Lacan se plantee al niño como objeto a, como falo, o con la conjunción a nivel agalmático de ambos; pero esta cuestión de la compulsión tenemos la impresión de que puede ser pensada desde la compulsión a la repetición. En esta compulsión el más allá comienza a estar presente, ya digamos hay una marca que conlleva una marca de goce y que diríamos también le da pie a Freud para plantear que esto implica la desmentida de la castración; es decir que efectivamente el niño puede operar como falo positivizado, diríamos desde la teoría de Lacan, en el sentido del falo imaginario como -j o como +j.

Pero nos importa esta cuestión de la compulsión porque en el Seminario de La Identificación, Lacan va a tomar esta cuestión de la suerte (fortuna, azar, tyche) que Freud trabaja, que el niño tenga mejor suerte que los padres, y en una clase del 22/3/63 Lacan dice que “pueda hacer diferencia con los padres, que sea no uno”. Y agrega “que no sea la maldición sobre el mundo”.La identidad en la diferencia no puede escapar efectivamente a la compulsión de la repetición. Es importante destacar esta cuestión porque desde “Introducción Del Narcisismo” esta línea, vía el amor, trabajando esta cuestión de la compulsión, está marcando su articulación con el goce.

Es difícil, por lo menos desde el punto de vista metodológico, plantearse lo que Freud enfatiza en el texto, que el Ideal viene desde afuera, y lo afirma en los últimos párrafos: “este ideal es impuesto desde afuera”. Entonces este es un punto interesante porque es así como se desprende la pregunta, “¿pero puede existir el Ideal sin la castración?”. Y que es algo que Lacan especialmente señala en las primeras paginas del trabajo que hace sobre la metáfora paterna, en el Seminario 5, donde dice no podemos hablar de neurosis sin Edipo. ¿Por qué Lacan hace ese comentario?. Es como de Perogrullo, podríamos decir. Pero el texto y trabajar la cuestión del yo ideal y del ideal del yo, sin introducir la cuestión de la castración da pie como para que Weis le haga este señalamiento a Freud y Freud tenga que hacer la aclaración. Este es un punto importante. Y en ese punto, casi ya por una cuestión de rigor epistemológico, cuando trabajamos toda la diferencia entre autoerotismo y narcisismo, tendriamos que dar cuenta de la castracion del Otro como anterioridad logica. Este Otro fuente de la asistencia ajena y de las motivaciones morales viene ya atravesado por la castracion.

El trabajo de Lacan sobre las psicosis y especialmente en relacion a Schreber mantiene la operacin del Ideal sin que opere la castracion en la estructura. Lo cual abre un problema que no se va a abordar aquí en relacion al sujeto y la psicosis ya sea en la infancia o en el adulto.

Desde otra perspectiva, el tema del ideal sabemos que entra fuertemente en el dispositivo, no por nada es el eje a partir del cual nos planteamos los textos de transferencia desde la vertiente del amor. Recordamos en el Seminario de La Ética, en “Nuestro Programa”, el primer apartado está dedicado a recordar los ideales que han perturbado dentro de lo que es el espíritu freudiano lo ha sido el devenir de una cura analítica o el seno de las sociedades analíticas. Recuerden el amor humano, la autenticidad, la no dependencia. A Lacan le interesa marcar como estos ideales, desde el punto ético de la valoración, han subvertido el espíritu freudiano. En ese sentido es importante depurar el concepto de ideal. Y Freud en el texto, este es un punto fundamental, se interna en como se podría articular al concepto de represión y lo define como condición de la represión. Y este es un punto fundamental. Ahora si es condición de la represión tiene que estar articulado a la castración en la neurosis. Y esto está muy destacado en la obra de Lacan, porque Lacan, cuando postula su significante del Ideal, recordemos el esquema Rho, en relación a la constitución del sujeto; dice claramente que este significante nunca opera solo. 

Un significante opera siempre en paridad con otro; y expresamente al Ideal lo coloca articulado al Deseo de la madre y al Nombre del padre. Si bien se generan asi todos los fenómenos del narcisismo, en el sentido del yo ideal y de aquello que tenga que ver con la imagen, la castración afecta tanto al Deseo de la madre como al Nombre del padre. Es decir, Lacan destaca muy bien que se trata de un Ideal que de entrada está vinculado a la castración desde el punto de vista preedípico y un ideal que va a operar en forma postedípica. Con lo cual nos conduce al problema de la identificación. En el Seminario 12, Lacan hace una diferencia importante en relación a las identificaciones freudianas y dice que no se puede hablar de esta primera identificación mítica sin considerar que en el seno de esta identificación al padre está incluida la regresiva; porque no se puede hablar de identificación al padre como mítica, en el sentido de previa a la elección de objeto en la estructura sin pensar en la pérdida de objeto en la estructura que tiene que anteceder. O sea que la estructura esté atravesada por la castración.

Este es el problema que trae una revision en relacion a las identificaciones primarias y secundarias. Si consideramos la identificacion primaria como aquella que define el ser antes de toda eleccion de objeto, Lacan insiste en el Seminario XII que se hace necesario que el objeto se pierda para que esta operacion se produzca. Es decir que combina la identificacion melancolica freudiana con la identificacion al rasgo (tal como la define Freud desde el sintoma), siguiendo el capitulo de la identificacion de “Psicologia de las Masas”.

“La primera ligazon ya es posible, por tanto, antes de toda eleccion sexual de objeto. En lo metapsicologico es lo mas dificil de presentar esta diferencia graficamente. Solo se discierne que la identificacion aspira a configurar el yo propio a semejanza del otro tomado como modelo”.

Este parrafo de Freud parece decisivo para los aportes de Lacan. El intento de graficar el problema se concreta en el esquema optico. Pero aqui es donde se plantea que la identificacion como marca primaria que sostiene esa division del sujeto que garantiza la constitucion del yo y se aspira para este yo una identificacion con el semejante: identificacion especular.

La marca del padre (o de los padres desde el Yo y Ello) del orden del ser es condicion de este ser del sujeto a la vez que posibilita la constitucion del yo y la identificacion especular.

Por lo tanto, ya en la Psicologia de las Masas podemos situar este esbozo de Yo que se constituye como resultado de esta marca primera fuera del narcicismo como anterioridad logica. Los aspectos reales del Yo (Kern Unseres Wesen: ‘el corazon de nuestro ser’) a los que luego el ser y el tener, articulando una logica atributiva organizan la dialectica en relacion al ser y el tener, pero ya con el -j operando como resto libidinal constituido, como resultado de esa primera escision.

El tema del amor es prínceps, en relación al ideal. Todo el texto de “Introducción Del Narcisismo” apunta especialmente a la cuestión del amor. Pero Lacan en el Seminario de La Transferencia propone juntar amor y culpabilidad. Y ahí nos da un pie como para marcar esta particular situación que se produce por la dependencia del objeto amoroso. Alude asi a un trabajo de la I.P.A., que destaca que la busqueda del objeto amado genera la culpa como resultante de dicha dependencia. Es decir que en esta situación de dependencia, que se establecera entre el amante y el amado, la culpabilidad está en juego. Y lo que nos dice Lacan ahí también, que quien ha leído Claudel, no tiene que olvidar la importancia del superyó, aun cuando diríamos que toda la dialéctica de la unión amorosa esté vinculada al amor, no hay que olvidarse de la importancia del superyó en las relaciones amorosas. Esto empieza a desarrollarlo en el Seminario de La Transferencia, la clase es del 31/5/61 y dice que el sujeto queda aprisionado en lo real.

La preocupacion de Lacan en el Seminario de la Transferencia es acerca de la distincion entre Yo ideal - Ideal del Yo. “El unico factor comun entre los dos es la imagen en su funcion de discernimiento del objeto, es el Yo ideal.” El factor comun, nos dice, es la constitucion de la imagen real, en imagen del cuerpo.
“Esta metafora del deseante puede volverse urgente en cualquier cosa. En Juanito es el momento en que lo deseado esta sin defensas, es el lugar del deseo del otro, donde amenaza la ribera, el limite (i a) es alli donde el sujeto se recupera y aparece la piel del oso dada vuelta y es en el interior que el fobico defiende al otro, se trata de la imagen especular. La imagen especular tienen un lado de investimiento y tambien otra cara que es la de ser una barrera contra el Pacifico del amor maternal”. El investimiento posibilitara la relacion de este yo con los objetos.

Pero Juanito puede llegar a tocar el limite de la caida de esta imagen del cuerpo por estar expuesto al deseo del Otro por suturar su falta. Este i a, imagen real conlleva dos operaciones: 1) la posibilidad de la constitucion del i’a fantasma imaginario, 2) por otro lado es la ultima trinchera, el dique que defiende al sujeto expuesto como objeto del Pacifico del amor maternal: sentimiento oceanico de ser devorado por el Deseo de la Madre.

El Ideal materno para Juanito, sabemos que opera como suplencia del Nombre del Padre y es el que pone la distancia para que el sujeto no caiga del lado del objeto. Ante la falla del significante del Nombre del Padre la metafora es importante en Juanito la suplencia que opera desde el Ideal. Queda como pregunta cual es la diferencia con la operacion del superyo que Freud refiere en relacion a Juanito. Una respuesta posible es circunscribirlo al ruido, a la voz.

Estas son puntas a las que el texto de Introducción del Narcisismo puede llevarnos. Freud tambien sugiere una relacion inversamente proporcional entre sublimación e idealización, donde hasta diferencia tipos, haciendo recordar el texto de los tipos libidinales: los idealistas (ya está hablando casi de cuestiones caracterológicas), son mucho más reacios que los hombres de modestas miras a convencerse del inadecuado paradero de su libido. Evidentemente hay algo ahí de la represión que es mayor y padeceran más monto neurótico. Y digamos, menos posibilidad de sublimación que aquellos de modestas miras.
En el texto, este pasaje del ideal a la conciencia moral, se hace directamente. Hay una cuestión del enjambre, este enjambre del cual Lacan va a hablar en Encore, enjambre de S1. Freud utiliza la conocida cita de que “la incitación para formar el ideal, cuya tutela se confía a la conciencia moral, partió de la injerencia crítica de los padres, ahora agenciada por las voces y educadores, y como enjambre indeterminado”. Este enjambre ya habla de las marcas que no necesariamente pueden ser subjetivizadas o personalizadas, y ahí ya está apuntando a esto que Lacan pretende; cómo llegar a la pureza de la marca en el enjambre de S1 que no hacen cadena.

El final del texto recupera nuevamente la cuestión de la distancia. Plantea cómo alejarnos del narcisismo primario. Y cómo este Ideal puede establecer la distancia. Es lo que efectivamente también Lacan toma en la carta a Jenny Aubry pensando en los niños que carecen de ese significante del Nombre del Padre, el que va a establecer la distancia; pero entre estos tres significantes tiene que establecerse distancia, no operan holofraseados.

Agregamos algunas cuestiones sobre este texto de “Un grado en el interior del Yo”, y el final de lo que va a ser “Psicología de las Masas”, que es lo que sujeta la teoría de Lacan, por lo menos a partir del Seminario 11. Dice: “la neurosis es extraordinariamente rica en contenidos pues abarca todos los vínculos posibles entre el yo y el objeto, tanto aquellos en que este es conservado como los otros en que es erigido en el interior del propio yo, pero de igual modo entre los vínculos del yo y el ideal del yo”. Es decir que Freud en este texto, en este capítulo de “Psicología de las Masas”, está trabajando una escisión permanente entre el ideal del yo y el yo. 

En el sentido o bien de acortamiento de esta distancia o de una escisión máxima. Y todas las tensiones que se generan, entre yo - ideal del yo, cuestión que va a retomar en “Duelo y Melancolía”, pensando esto desde su articulación con la neurosis hasta pasar a la manía y la melancolía.

Debieramos recordar que en ningún momento Lacan propone, por lo menos en su teorización, que el fin de análisis implica una caída del Ideal del yo; es decir que el Ideal del yo desaparezca como se pudo haber deslizado en ciertos textos. Por eso su importancia no solamente en relación a lo que se transmite a los alumnos, sino para pensar cuestiones en relación a la transmisión del psicoanálisis, escuelas y fin de análisis. Con lo cual al final del Seminario 11, lo que Lacan propone es una distancia entre el Ideal del yo y el objeto a. Simplemente una distancia que es lo que Freud sostuvo en Introducción Del Narcisismo. Si la unica dignidad del sujeto es el objeto a, el trabajo del analisis sera producir la maxima distancia entre el sujeto en relacion a su objeto causa y el goce del Ideal que lo aleja de la causa del deseo.

Preguntas

Intervención: ¿Que es este ir mas alla del Ideal en el fin del analisis?

Alicia: lo que yo he leído, lo que se ha dicho. Más allá del Ideal, implica cercar algo del objeto; lo cual no quiere decir que el Ideal deje de operar o desaparezca. Tanto es así que Lacan se esfuerza por marcar que este enjambre opere como puro enjambre, lo va depurando cada vez más hasta que cobre la fuerza de este S1, como rasgo y como único y no con la articulación de otro significante; que creo que es de donde Lacan empieza a pensar, al final de su obra, otra posibilidad del fin del análisis, encontrar la marca de ese significante. Creo que esto ha traído problemas y voy a decir uno. Pensar que el objeto se quede sin la distancia respecto del Ideal a mi entender es pensar que pueda haber justamente la constitución de un fenómeno de masas con mucha facilidad. Porque no se puede vivir fácilmente sin Ideal. Y por eso Lacan en la última pagina hace una referencia en relación al nazismo y al holocausto, y por algo me parece que Lacan la trae. Que esto del deseo puro toca los límites de lo que puede ser la cuestión de ciertas cuestiones perversas. Habría que trabajar mucho sobre esto. Es como anillo al dedo para que aparezcan fenómenos de masa, líderes, amos.

Intervención: ¿al haber más distancia?

Alicia: si el Ideal desapareciera. Importa aquí la cuestión clínica. Quiero marcar que Freud hizo el esfuerzo como para decir la distancia permanece, y la vamos a despejar de los fenómenos de amor; y vamos a tratar de trabajar el goce que conlleva hasta sus ultimas consecuencias pero en ningún momento esto implica que el ir más allá significa borrar estos fenómenos pero no quiere decir que cae.

Intervención: por eso es polémico la frase de ese ultimo capitulo donde propone mirar al horror sin velo. La pregunta es si eso es posible o si es imposible? Él dice es necesario en todo caso dirigir hacia eso una mirada valerosa.

Alicia: sí, nada más. Esto no lo marca como destino del sujeto.

Pregunta: ahora volviendo al tema del narcisismo, me interesaba hacerte una pregunta en relación a esta cuestión del cuerpo que obedece.

Alicia: es muy interesante porque esta cita está articulada con la elección anaclítica y la narcisista, en el seminario. Es decir que se entronca con la vertiente del amor en el sentido de la condición de la elección de objeto. Es otro vertiente. Pero efectivamente creo que marca también esta vertiente que Freud da del ideal sexual que se articula con la lógica del fantasma en relación al Ideal del goce del Otro. Que es el único posible que sostiene la imposibilidad de relación sexual. Nosotros lo trabajamos en el Seminario, hace bastante, en relación al fenómeno psicosomático.

Pregunta: la otra pregunta que te quería hacer es en relación a esta vertiente del amor, ese amor de los padres, ese amor desde el narcisismo de los padre vertido en ese amor al hijo y esa vertiente compulsiva que vos señalabas. Y ahora, hay algo que dice Freud allí, yo no recuerdo exactamente el texto pero él dice pone entre paréntesis la sexualidad infantil, el rechazo, la desmentida de la sexualidad infantil, entre paréntesis pone, como algo que queda por fuera del amor, del narcisismo ese de los padres proyectado en el hijo.

Alicia: es muy interesante.

Intervención: él viene hablando de “el narcisismo primario que suponemos en el niño y que comprende una de las premisas de nuestras teorías sobre la libido, es más difícil de asir por observación directa que de comprobar mediante una inferencia retrospectiva hecha desde otro punto”.

Alicia:. Lo doy como punto fundamental desde donde puedo pensar el narcisismo primario.

Intervención: entonces dice “así prevalece una compulsión a atribuir al niño toda clase de perfecciones (para lo cual un observador desapasionado no descubriría motivo alguno) y a encubrir y olvidar todos sus defectos (lo cual mantiene estrecha relación con la desmentida de la sexualidad infantil), la desmentida de la sexualidad infantil; digo como que hubiera una estrecha relación entre la desmentida de la sexualidad infantil y el hecho de atribuir todas las perfecciones al niño, como que la sexualidad infantil quedaría, un poco como fuera de las perfecciones.

Intervención: exceso a la perfección. Es un defecto que le aparece como exceso.

Alicia: me da la impresión de que él acerca cada vez más Ideal a superyó. En algunos textos función del Ideal es la conciencia moral. En los últimos textos es al revés. Es decir como función del superyó, inclusive en las “Nuevas Conferencias”, es la función del Ideal. Es decir es una función. Lo instituye como un aspecto, subsidiario de... pero si es subsidiario de, conlleva de alguna manera las características del superyó. Esto hace pensar en relación a toda la problemática de la fobia, que está muy trabajada en el Seminario La transferencia y a partir del esquema óptico, no por nada, y a partir de la problemática del Ideal del yo, cuando Lacan en el Seminario La transferencia está trabajando la cuestión de la fobia y trabaja el imaginario de la fobia como forma de parapeto, como defensa, como la necesidad de constituir ese imaginario; y pone allí toda la cuestión del Ideal. De todas maneras Lacan lo toma en ese seminario; dice, a mí lo que me importa es que se entienda muy bien la diferencia entre Yo ideal e Ideal del yo. Eso sí me importa porque digamos, marcar la diferencia entre instancia simbólica y lo que tiene que ver con lo imaginario. De todas maneras le otorga al Ideal del yo el carácter de una introyección benévola, del lado benévolo, mientras dice que el Superyó permanece, digamos, con una cierta exterioridad. Esto es lo que aparece a ese nivel.
Pero en el texto, cuando está esta cita al pie de los vasallajes del Yo, y Freud precisa la cuestión de lo que está vinculado con la culpabilidad, con la reacción terapéutica negativa y situa al Ideal del Yo en su aspecto de que produciendo estos sentimientos como prestado. Entonces marca los dos aspectos. La única solución para estos casos, y yo estimo que se refiere a casos muy graves, es que el analista se coloque, digamos, del lado del Ideal. Con lo cual se plantea un problema, muy serio en relación a la posición del analista porque cada uno tiene la libertad de decidir si de pronto puede elegir el soporte del Ideal y aceptar el efecto de una suplencia en la transferencia.

Intervención: Strachey aclara en Introducción Del Narcisismo que la conciencia moral después es lo que va a nombrar como superyó; el que mide la distancia entre el Ideal y el yo y esta con el dispositivo.

Alicia: es ineludible que el Ideal es una parte del dispositivo, entonces por eso de alguna manera cuando trabajamos los textos, no podemos dejar de pensar, que el periodo del comienzo de la neurosis de transferencia, en el sentido de promover el amor de transferencia, no hay cura sin amor, marca esta cuestión del Ideal, que inclusive lleva, Freud esto lo dice, a sostener la cuestión de la sugestión como acompañando la transferencia. Desde esa perspectiva entra necesariamente dentro del dispositivo.